Estreno: 13 de Noviembre del 2015
Estudio: Studio 4°C
Géneros: Psicológico, Sci-Fi
Basada en una de las novelas de
ciencia ficción del fallecido Itou Keikaku, se nos introduce a este “proyecto”
de adaptación de 3 de sus principales novelas. Una de ellas es Harmony, la cual
nos traslada a un futuro en el cual la ira, el dolor y la tristeza no tienen
cabida, donde la vida es eterna, sin enfermedades, con nada que la acompleje.
Un mundo donde el programa “Medicare”
trata a las personas por medio de nanotecnología para estar siempre saludable,
y bajo observación gracias a los implantes de “Watch me” previniendo de que
nada en esta sociedad avanzada se salga de control.
Cian, Tuan y Miach son tres adolescentes
que aún no dependen del sistema, pero ya sus cuerpos han sido preparados, dado
que este sistema de nanorobots se activa cuando se alcanza la adultez.
Se nos introduce a este pequeño
grupo de amigas por medio de vistazos al pasado de una de ellas, en esos
recuerdos vemos como Miach con una hipnotizadora presencia endulza los oídos de
Cian y Tuan, les cuenta sobre un pasado en el cual reinaban otras costumbres,
como las de entregar “tarjetas de presentación” o incluso la cremación de los cuerpos
inertes. Miach discrepa con el Japón que se presenta como un lugar estéril, blanco,
donde prima la tecnología; se empapa con libros de filosofía, argumenta contra
la sociedad de control que las rodea, y menciona lo fácil que podría hacerla
tambalear planeando un asesinato masivo.
Pero Miach no se decanta por esa
opción, sino que le plantea la liberación a sus amigas realizando un suicidio
colectivo, el de ellas tres.
Cian por temor decide no tomar la
pastilla a último momento, pero Tuan acompaña a Miach, la cual es la única que
fallece ya que Tuan es salvada cuando Cian va por ayuda. El sentimiento de
culpa invade los corazones de las dos amigas sobrevivientes, es así que tras
tomar rumbos separados; Tuan se une a la “World Health Organization”,
ingresando años después al selecto grupo de control llamado “HELIX” el cual
participa en zonas de conflicto, alejándose lo más posible del mundo perfecto y
falsamente amable de Japón.
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Los primeros 15 minutos
resultarán algo densos, entre los pesados diálogos de Miach y las vivencias de
Tuan que parecen inconexas al comienzo, pero más tarde conseguiremos armar esa
historia que nos van tirando en partes. Tras ese denso comienzo vamos viendo
más del mundo actual, el que le pesa a Tuan en esa sociedad de control de la
salud que parece salido de las obras de Michel Foucault (a quien no dudaron en
citar en la misma película), mezclado con “Un mundo feliz” de Aldous Huxley, y
nos vamos interesando más en que los maquiavélicos planes de Miach que pueden
volverse realidad.
Artísticamente es una obra
agradable, muy bien animada aunque tenga momentos de poco detalle, tiene un uso
de CGI de calidad, pero lo que son los diálogos, la cantidad de información que
se recibe puede ser abrumador; no es lo mismo leer una novela a nuestros ritmos
(como ya he mencionado en alguna otra adaptación), donde podemos releer diálogos
si alguno no nos queda claro, a verlos en una película, donde el ritmo lo pone
el actor de voz y el guionista y uno intenta agarrar todo lo que se dice en
pocos segundos, lo cual puede ser pesado para seguir. Así mismo, por más
pesados que resulten algunas de las conversaciones, no la convierte en una mala
obra ni deja de ser menos interesante. Quienes gusten de las obras elaboradas
de ciencia ficción, van a saber apreciar esta película con sus pros y sus
contras… (Si sobrevivimos a Ergo Proxy todo es posible).
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