Año: 2018
Páginas: 448
Sello editorial: Montena (Penguin Random House)
Más información en la web de Me gusta leer ¡Gracias por el ejemplar!
La siguiente reseña es de un segundo tomo de la saga, la primera parte la encuentran -aquí-. Igualmente la haré con el mínimo de información spoiler para que sea apta para todos los que me lean.
A modo de recordatorio, en el primer tomo nos enfocamos en Axlin, una joven que crece en una pequeña aldea en los confines de este mundo, uno de los últimos enclaves que quedan en la región que intenta sobrevivir de los extraños monstruos que los asedian. Desde joven ella decide romper con lo dictado por sus mayores: no quiere ser madre y vivir recluida; Axlin, que se convierte en la última escriba de su aldea, decide salir al mundo para aprender de esos monstruos y cómo combatirlos, registrando todo en un bestiario y así llevar su conocimiento al resto de las aldeas.
Una idea muy noble, que la lleva a enfrentarse con la realidad y descubrir que el resto del mundo confluye a un lugar llamado como “La Ciudadela”, donde se refugia la gran mayoría de la población de ese lejano mundo y el conocimiento en una gran biblioteca; todo esto protegido por los Guardianes de la Ciudadela (que da nombre a la saga), una especie de fuerza militarizada con habilidades sobrehumanas, fácilmente identificables por sus ojos de color dorado o plateado que intimidan a los monstruos.
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Quienes hayan leído el primer tomo recordarán que sobre la segunda mitad aparece Xein, quien tiene esas características, y toma protagonismo en este libro. Él comenzará a trabajar como uno de esos Guardianes, ayudando a mantener la Ciudadela como el sitio de ensueño que es, donde la gente vive apaciblemente lejos de los terrores que se viven en los enclaves.
Ya pasando al segundo tomo de lleno, es un libro que nos choca al venir del primer tomo por un cambio de ritmo en la narración: mientras que en el Bestiario de Axlin teníamos una historia de aventuras y acción a un ritmo vertiginoso, aquí tenemos a una Axlin que no precisa correr o estar todo el tiempo en guardia, La Ciudadela es un lugar protegido y tranquilo, aunque extraños sucesos comienzan a aparecer, desencadenando varias preguntas a nuestra protagonista (que ya sabemos que no se puede mantener quieta y callada). Me costó un poco adaptarme a este nuevo ritmo y darme cuenta que el dinamismo se iba a generar de otra manera, planteando una serie de incógnitas, y dándonos un libro de misterios, de cuales nuestros protagonistas intentarán resolver.
Sobre los misterios y el secreto que da nombre al título, obviamente no puedo adelantarles porque obviamente quitaría la gracia a la trama, pero sí decirles que me lograron enganchar y atraparme con cada giro, despertando mi interés por el desenlace de esta historia que se verá desde una nueva perspectiva, ya que tendremos a Rox, otra guardiana compañera de Xein, como relatora del último tomo.
Sobre los personajes en este tomo se siente que llegamos a interiorizarnos más con Xein; a Axlin ya la conocíamos y su personalidad no sufre de grandes cambios, porque sigue siendo la gran cuestionadora del tomo anterior, pero Xein se lo siente por momentos algo caprichoso y engreído, y termina madurando por la fuerza.
En este libro el universo de los “Guardianes de la Ciudadela” parece terminar de cobrar forma, si bien puede que sintamos ese choque de ritmos entre ambos libros, creo que se disfrutan a su manera y nos deja con muchas ganas de llegar a la conclusión de esta historia con una nueva narradora protagonista, el último tomo sale en marzo (en España) y cruzo los dedos para que llegue bien rápido al Uruguay.
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| Ultimo tomo de la saga |
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