¿Conocían la historia de la niña japonesa Sadako Sasaki? ¿La historia de la niña que hizo mil grullas de papel para pedir por su vida?
Este libro escrito durante los ‘90 llega a nuestras manos unos 20 años después de su primera publicación, gracias a Penguin Random House que se animó a traducir esta historia para que llegue al mundo de habla hispana.
El libro nos cuenta la historia de Sadako Sasaki, quien cuando estalló la bomba nuclear en Hiroshima tenía solo 2 años, y vivía con su familia a menos de 2 kilómetros del epicentro de la bomba. Su casa voló en pedazos, como todo lo demás en esa furia de radiación, fuego y viento, pero su madre la encontró a ella y a su hijo mayor entre los escombros, aunque en la huída de encontrar refugio, no solo vivieron el horror de ver cadáveres, o gente pereciendo y desesperada por ayuda, sino también la lluvia radioactiva.
Aparentemente ellos quedaron intactos… por fuera, pero “la pika” (como le decían a la bomba), tuvo sus efectos a largo plazo: Sadako tenía 12 años cuando la diagnosticaron con leucemia. Hasta ese entonces era la chica estrella del club de atletismo, recientemente habían ganado una competencia de relevos, pero de un día para el otro comenzó a sentirse mal. La internaron un 18 de febrero y falleció el 25 de agosto de 1955, pero nunca dejó de luchar; en su lucha más representativa se encuentran las grullas de papel: siguiendo la leyenda popular de que si hacía 1000 grullas de papel, se cumpliría un deseo, ella las hizo con el propósito de curarse, e incluso hizo más de 1000, pero las grullas no surtieron efecto, la enfermedad fue lamentablemente más fuerte.
Es curioso el contexto en el que surge este libro, ya que si bien narra esta historia que ha sido contada ya en otros libros y que pasa de boca en boca, el autor Ishii Takayuki se vio movilizado por su propio hijo a investigar, ya que la historia narrada en clase le llevó a preguntarle a su padre por esa niña, y el padre decidió consultar bibliografía al respecto e incluso viajar a entrevistarse con los padres y hermanos de Sadako, quienes en los 90 aún vivían, para conocer los pormenores de la historia, cómo era esa niña que tanto querían los que construyeron una estatua a su imagen para recordarla.
No cae en el morbo, uno puede investigar más sobre el tema, tener más datos, ver fotografías y videos registrados de las consecuencias de la bomba, uno puede indagar más y sentirse horrorizado. Pero para ese entonces el libro ya plantó su semilla, el de la cara humana de la guerra, el de los civiles y los propios niños. El libro no lo menciona, pero recuerdo que las víctimas de la bomba eran discriminadas por el miedo a “un contagio”, y uno piensa, ¿no pasaron ya por demasiado como para agregar aún más? ¿Qué tanto precisamos para tener piedad y comprender al otro? En fin, es un libro para trabajar el mensaje de ayuda y comprensión al otro, y sin dudas el mensaje principal es de la búsqueda de paz. La historia de Sadako es memorable, pero solo fue una niña de tantas que fallecieron víctimas de la bomba nuclear, ni siquiera sabemos cuántas “Sadako” se perdieron porque no hay números exactos, y esa es una incertidumbre de la guerra, y de la bomba nuclear...
Si quieren conocer de primera mano la historia de un superviviente les recomiendo fuertemente este documental de Tsutomu Yamaguchi, que sobrevivió a la bomba de Hiroshima Y la bomba de Nagasaki (SI, las DOS), increíble testimonio.
Y les recomiendo unas películas de anime relacionadas:
¡Hola! Conocí la historia cuando fui a Hiroshima y la verdad es que me causó mucha impresión. No tenía ni idea de que Penguin se había animado a traducir esta novela y aunque por lo general no suelo leer biografías, a esta sí que me gustaría darle una oportunidad.
ResponderEliminar¡Nos leemos!
¡Hola Ana!
ResponderEliminarQue reseña más interesante. Si que conocía la historia de esta niña y las grullas de papel, pero me ha gustado mucho recordarla con tu entrada y además averiguar un poquito más. Sin duda me quedo con ganas de leer este libro.
Por cierto, tengo muy pendiente La tumba de las luciérnagas, ahora que me lo has recordado sin duda la veré pronto ^^
¡besos!
Holis!
ResponderEliminarSin duda una historia interesante, sin embargo no me atrae mucho leer sobre biografías. Prefiero quedarme con unos pocos párrafos qué conocer detalles de la vida de las personas, no sé, cosa de gustos supongo jaja
Besos
Jocelyn | Blog Ave Lectora
¡Hola!
ResponderEliminarSí que me suena esta historia, pero no sé mucho la verdad. Me parece un libro muy interesante (y duro), así que espero poder leerlo en algún momento :). Me apunto también el documental, y de películas solo he visto La tumba de las luciérnagas.
Un beso.
Hola.
ResponderEliminarPues no conocía la historia ni tampoco el libro, pero sin duda me lo llevo apuntado, es una parte de la historia que por culpa de tanta serie, película y demás americanas se deja de lado, cuando hizo tanto mal y aún lo sigue haciendo. La tumba de las luciérnagas desgarra, pero es de mis películas favoritas.
Muchos besos.
No lo conocía, pero me llama la atención ❤
ResponderEliminar¡Hola Ana!
ResponderEliminarAmé esta reseña, sin dudas es un libro que todos deberíamos leer en algún momento de nuestras vidas, por mi parte leí 3 tomos de 4 de "Pies descalzos" y fue muy desgarrador poder leer esa historia.
No sé si estaré en el mood de leerla ahora porque ayer terminé Maus y sin dudas estoy muy desgarrada, a pesar de los toques de humor si me afectó bastante la historia, las secuelas de la familia, todo.
Pero se va super apuntado para la lista de recomendaciones porque es un libro muy interesante y tus recomendaciones sobre autores/autoras niponas me interesan muchísimo.
Muchas gracias por tu reseña Ana.
¡Un abrazo y un beso!
Holaa, pues que me ha dado calosfríos cómo la violencia solo creció, ellos hicieron esto, nosotros esto, y así, rompe el corazón cómo se olvidan las cosas.
ResponderEliminarBesos :3